Cachonda en la oficina

Hola chicos y chicas. Sé que hace que no os cuento nada pero me he tomado unas vacaciones de semana santa bastante largas. Volví el lunes. Y precisamente porque no he follado nada con mi marido en todo este tiempo tengo algo que contaros ahora.
El lunes a eso de las 10 de la noche seguía en la oficina. Hay un tío en el despacho de al lado mío que no es que esté especialmente bueno pero tiene un cuerpazo de la leche. Mis cristales son transparentes y se ven los despachos colindanes. Así que, entre lo cachonda que estaba y que me estaba poniendo enferma imaginándomelo desnudo… me fui a su despacho. Sé que parece increible pero… directamente sin decir nada apoyé un pie sobre una de sus sillas y empecé a tocarme el coño. Él, obviamente se quedó mirandome sorprendido. Yo lo único que le dije fue… “Estoy cachonda, si quieres follarme bien, si no, mírame mientras me masturbo. Lo único que quiero es que me dejes ver tu torso”.
Naturalmente estábamos solos a esas horas en la oficina.
Él se acercó a mí y se puso delante mío. Estaba muy empalmado. Se le notaba a través del pantalón del traje una enorme barra. Seguí masturbándome y me baje el tanga.
Ese día llevaba un vestido negro completo, medias hasta la pantorrilla y zapatos de tacón negros.
Seguí masturbándome, tocándome el coño y metiéndome los dedos. Entonces él se sentó en la silla y se sacó la polla literalmente a través de la cremallera del pantalón. Empezó a meneársela mientras tanto. Me senté encima de la mesa abierta de piernas y él se dio la vuelta en la silla mirándome. Se levantó y se acercó a mí. Entonces empecé a pajearle mientras se quitaba la camisa. Dios, era mejor el torso de lo que me había imaginado…
Entonces me pasó algo que nunca me ha pasado ni había hecho. Me dijo que parara y se la pajeara con los pies. Me pareció excitante. me quité los tacones y con las medias puestas empecé a pajearle… me costaba un poco porque estaba medio tumbada en la mesa y tenía que mantener las piernas en alto pero… me excitaba¡¡¡. se la machaqué con fuerza, sin cuidado. incluso intentando hacerle daño. Le sacaba el prepucio todo lo que podía y se lo rozaba con todas las partes de mis pies.
Me puse más cachonda. Me saqué una teta con una mano y empecé a pellizcarme el pezón. También me quité una de las medias de una pierna dejando que viera uno de mis pies si es que tanto le gustaba…
se corrió por mis pies… y por mi vestido. eso era una fuente…Después se la chupé mientras la seguia teniendo dura para limpiarle la polla y para terminar corriéndome mientras yo me metía 3 dedos en el coño… Buff que morbo¡¡¡
Hoy casi me muero al verle a través del cristal…
un beso. os sigo contando.
Chicas, chicos, os gusta que os lo hagan con los pies? y a vosotras os gusta hacerlo?
Besos Aurora